Compartimos las vivencias de algunas de las personas que impulsaron y apoyaron la Semana Santa en la Parroquia Santa Marta, Dios las llene de bendiciones:
«Gracias Dios Padre por hacernos participes de tu obra desde el amor.
Gracias por hacernos ese llamado privilegiado para ser obreros de tu gran misión; porque desde tu inmenso amor, vas poniendo en el corazón esa labor de pertenencia, compromiso, respeto, unidad, para cada vivencia de esta Semana Santa.
Gracias te damos Señor porque siempre estás con nosotros, porque dispones cada persona, cada elemento para que sea posible tú Creación.
Amén, amén, amén.
Felices Pascuas.
Parroquia Santa Martha.»
Silvia Sierra
«Desde la mirada de la música:
Cantar para el Señor siempre ha sido un regalo que nos ha emocionado el corazón. Cantar en Semana Santa es compartir ese regalo con toda la comunidad que se une, se emociona y usa cada canto para expresar su propio sentir dándole así más fuerza a la oración.
Cómo nos hacía falta el calor abrasador de una comunidad que clama a su Dios, la Paz. Cada preparación a las celebraciones propias de la Semana Santa, significa pensar en cada detalle donde Dios pueda hablar a su pueblo. Cada nota de cada melodía cuidadosamente seleccionada buscó ser un instrumento a través del cual cada fiel pudo orar.
No hay cansancio, no hay horarios. Solo la espera emocionante de cada misa llena. Mirar hacia la puerta y buscar sillas para la comodidad de todos. Encender los parlantes y hacer que resuene la alegría en todo el barrio.
El agradecimiento es para la hermosa comunidad donde vivimos, por celebrar, junto a nosotros, esta fiesta. Por unirse a lo que humildemente pudimos preparar con tanto amor y aprovechar cada espacio, cada flor, cada luz y cada canto para acercarse más y más a Dios. Cada segundo de vida que el Señor nos dé será para dar testimonio de su amor vivo y misericordioso en cada espacio que, juntos, podamos seguir construyendo en familia y como comunidad parroquial.»
Ministerio de Música: Zalmo 151
«Una de las experiencias más grandes de nuestra fe es el sentido de comunidad, Jesús vino por y para todos, se entregó a la muerte en cruz por y para todos y resucitó por y para todos… Y eso lo experimenté de manera especial en esta Semana Santa. Teníamos sed de retornar al templo y celebrar comunitariamente nuestra fe: unos cantamos, muchos bailaron, otros decoraron el templo, muchísimos hombros generosos se ofrecieron con devoción a llevar los santos, muchísimas manos generosas llevaban agua, arreglaban detalles, acomodaron el sonido, se ofrecían para lo que hiciera falta. Oramos todos por todos. Definitivamente, la fuerza de una comunidad no está en su riqueza económica, sino humana, que se fortalece y engrandece en el cultivo de los valores y la vivencia permanente de la fe. Sigamos participando todos de la vida parroquial, animémonos a formar parte de los grupos, que se nos note la alegría de sabernos hijos de Dios. Felices Pascuas de Resurrección.»
Carmen Fariñas
«Ha sido hermoso, después de haber pasado lo más fuerte de la pandemia, poder volver a aunar los esfuerzos para la vivencia de la Semana Santa en nuestra Parroquia. Nuestros altares no son elaborados a partir de grandes planeaciones; sino que, con los recursos que tenemos y lo que nos vaya inspirando el Espíritu Santo, cada uno de los que participamos aporta sus ideas… Todo es de Dios que nos da el don de poder crear y crear para que otras personas puedan sentirse acogidas, con más fervor al ver este tipo de maravillas que el Señor nos pone. Es lindísimo cuando se unen cada vez más personas, porque se siente que la parroquia crece… haber podido contar con los jóvenes de la Confirmación y otros que retornaron ha sido una gran bendición; haberles podido enseñar que cada detalle, una flor colocada de determinada manera, una cinta, un pellizco en la tela tiene un sentido… Esperamos que muchos más se animen a acompañarnos en este servicio tan hermoso y edificante, no sólo en las grandes fiestas, sino a lo largo del año. Gracias a todos por vivir plenamente cada día de la Semana Mayor. Dios nos bendiga.»
Ángela Solórzano
